El pasado 21 de enero Microsoft nos sorprendió gratamente a todos con lo presentado en la conferencia sobre Windows 10. Dejando a un lado los anuncios más extravagantes como el Hololens o el Surface Hub, todo lo demás giró en torno a Windows 10, un sistema operativo que es una realidad y ya se puede palpar si te animas a probar la versión Preview que ofrece Microsoft a los usuarios para que se vayan enamorando de él, y para que ayuden al desarrollo con mucho feedback.
Hay que ser muy terco para no admitir que esta nueva manera de Microsoft de hacer las cosas luce muy beneficiosa para nosotros los usuarios. Windows 10 no solo viene cargado de novedades interesantes, sino que será gratis para los poseedores de cualquiera de las dos últimas versiones de Windows. No hay manera más sencilla y efectiva de hacer que todo el mundo actualice, y creo de verdad que muy pocos serán los que se rehúsen a traer a sus equipos al futuro cuando no les va a costar nada, y con un Windows 10 que es definitivamente atractivo.
MS Windows
Por muchos años he tenido una relación amor/odio con Windows, pero siempre hemos tenido una relación. Vengo usando el sistema de las ventanas desde Windows 95. Cuando era una niña y mis clases de computación en primaria consistían en jugar al ahorcado y dibujar en Paint, ahí estaba Windows. Cuando tenía 14 años y usé por primera vez Internet, ahí estaba Windows. A los 19 me regalaron mi primer ordenador personal, y ahí estaba Windows. Por más que tenga sus fallos, este sistema forma parte de la historia de nuestras vidas, porque usamos ordenadores personales para casi cualquier cosa, y a pesar de que hay quienes usen Mac o Linux, la realidad es que todos han pasado por Windows alguna vez, porque el sistema es casi sinónimo de computación personal.
Soy de esos usuarios a quienes les gustó Windows 8, pero les gustó más Windows 8.1. Nunca he sentido la necesidad de regresar a Windows 7, porque aunque para muchos es la mejor versión a la fecha del SO, ya a estás alturas me parece que está viejo para mis gustos. Como entusiasta de la tecnología y fanática de la innovación más que de una marca o un dispositivo, me gusta usar lo nuevo, lo más reciente, lo más interesante. La tecnología es dinámica, quedarse estático por mucho tiempo es aburrido para el usuario, pero mortal para una empresa.
Microsoft ha intentado muchas cosas nueva con Windows en los últimos años, y aunque no han sido todas exitosas, es refrescante ver que la empresa no deja de intentarlo, y no le ha dado la espalda a la innovación.
Windows 10
Windows 10 es la respuesta a un sistema que no termina realmente de perder usuarios, pero que por años ha perdido el amor de los que tiene. Raramente escuchas a alguien hablar de, o defender a Windows como los fanboys defienden a iOS o Android. Ni qué decir de los fanáticos de Linux. La mayoría usa Windows porque es lo que viene con su ordenador personal, pero muy pocos gritan lo genial que les parece esta función aquí, o esta otra allá. Al contrario, con Windows 8 fue tanta la confusión generada por su interfaz híbrida que lo que escuchabas sobre Windows eran casi siempre quejas. ¡¿A dónde se fue mi menú de inicio?!
Durante el fin de semana estuve probando a fondo Windows 10 Technical Preview. Aunque Microsoft había dicho en su conferencia que deberíamos esperar una semana para obtener varias de las novedades anunciadas, nos sorprendieron nuevamente lanzando la descarga apenas dos días después. Con toda mi curiosidad decidí descargar esta vista previa como lo hice con la anterior, solo que esta vez sí instalé el sistema, y lo hice con mucho entusiasmo.
Por dos razones bastante obvias no he instalado el sistema en mi disco duro, sino en una máquina virtual. Primero, porque no tiene sentido instalar una versión inestable en la PC que usas a diario, ni tampoco usarlo permanentemente ya que recoge estadísticas de todo lo que haces, y tampoco valoro tan poquito mi privacidad. He montado este Windows 10 en una máquina virtual con 4GB de RAM, unos 60GB de espacio en disco, le di 4 núcleos de mi procesador, aceleración 3D activada y todas esas cosas chulas, y 1GB de memoria para vídeo. Y he estado usándolo casi como si fuese mi OS principal por 3 días, lo que quiere decir que he instalado y probado todas las aplicaciones que uso normalmente.
El mejor Windows que he usado
Todas esas cosas que me molestaban un poco en Windows 8 han desaparecido, y han sido reemplazadas por características que elevan la usabilidad del sistema. Lo primero que ves al iniciar Windows 10 por primera vez es el escritorio clásico de siempre, pero ahora con 3 cosas nuevas que llaman la atención.

La primera es ese gran cajón de búsqueda que le han puesto a la barra de tareas. Desde ahí puedes escribir cualquier cosa para buscar en la Web o en tu equipo. Pero lo mejor de todo es, sin dudas, Cortana, la asistente personal de Microsoft. Lamentablemente, cometí el "error" de bajarme una versión de Windows 10 TP para México, y cuando intento usar Cortana me tira un error de que no está disponible en mi región. Se preguntarán si es posible cambiar el idioma y la región de Windows para darle la vuelta a esto, fue justo lo que hice, pero sin éxito. De hecho, es una de las principales preguntas que se hacen desde la app de feedback que han integrado en esta versión para que los usuarios dejen sus dudas y comentarios sobre el sistema.

Lo que pudimos ver de Cortana en la presentación de Windows sin duda luce genial, y aunque no la he podido probar en esta oportunidad, supongo que ya tengo otra cosa de la que comentarles cuando por fin lo haga. Si no te interesa Cortana, igual puedes quitar el cuadro de búsqueda de la barra de tareas, o reducirlo a un simple icono, aparentemente Microsoft se dejó de eso de imponernos cosas en la interfaz del sistema a lo Windows 8.
Lo segundo que llama la atención es un nuevo icono en el área de notificación, desde ahí podremos lanzar ahora un nuevo centro de notificaciones que por ahora solo muestra los eventos del sistema, pero que, en un futuro, podrán ser usados por aplicaciones de terceros para mostrarnos todo lo que nos interesa. Otra cosa importante de este "Action Center" es que ha reemplazado a las confusas y muy poco queridas Charm bars que a la fecha muchos ni entienden por qué se llaman así. Ahora desde el centro de notificaciones tenemos acceso a ajustes rápidos, como cambiar a modo Tablet, encender o apagar el WiFi, activar la rotación de pantalla, activar la red VPN, o, directamente, abrir el menú de ajustes.

Y, lo tercero es un nuevo icono en la barra de tareas que a simple vista no te logras hacer a la idea de qué es lo que hace, pero que queda muy claro al presionarlo (mejor si ya tienes varias ventanas abiertas). Se trata del visor de tareas (en inglés task view), una función que muchos tenemos casi una década esperando que llegara a Windows, y que en Linux muchos conocen como áreas de trabajo y en Mac como exposé.
Finalmente, podemos crear escritorios virtuales en Windows, y tenemos una vista de todas nuestras ventanas abiertas organizadas de una manera muy agradable. La cantidad de escritorios que puedes crear es ilimitada, y puedes mover ventanas de uno a otro directamente desde el visor de tareas haciendo clic derecho sobre ellas, aunque se extraña la posibilidad de hacerlo simplemente arrastrando. Otra cosa que me gustaría ver es un menú contextual en cada ventana que te permita enviarlas a un escritorio virtual específico sin necesidad de abrir el visor de tareas.
El nuevo menú de inicio
Ha vuelto, y de la mejor manera posible, el tan extrañado menú de inicio clásico está de regreso en Windows 10 pero mejorado. La pantalla de inicio no ha desaparecido por completo, sino que podemos mirarla si expandimos el menú con solo presionar un botón. Este menú de inicio es, en parte, como el de Windows 7 y se mezcla con un área de live tiles como las de Windows 8, que podemos mover a placer y redimensionar, además de que podemos quitar y poner las que queramos, y no tenemos un espacio limitado, ya que haciendoscroll accedemos a más baldosas aún, al infinito y más abajo.
http://es.gizmodo.com/windows-10-podria-llegar-en-julio-pero-no-para-smartph-1701370204